¿Tiene futuro la OTAN?
La llegada de Donald Trump a la Casa Blanca ha sido como un tsunami para las relaciones transatlánticas. En su primer mandato ya había exigido que los aliados europeos contribuyeran más y se había quejado por el excesivo peso que suponía la Alianza para el presupuesto de Washington. Pero en este arranque disruptivo de su segundo mandato ha ido más allá, tanto que hay dudas de que sigan sintiéndose comprometidos con la defensa colectiva. Sea como sea, la OTAN no va a volver a ser lo que era. Como apunta Pol Bargués, coordinador de investigación del CIDOB, "dudo que ninguna otra Administración de EEUU vuelva a apostar por la seguridad europea como pilar central. La OTAN va a cambiar su sentido. Es un momento crucial para ver la transformación de la OTAN en otra alianza que su función principal no sea la seguridad europea. EEUU ha dado el paso. Esto lleva a otra arquitectura de seguridad en Europa".