Mohammed Sefiani
Alcalde de Chefchauen (2009-)
Mohammed Sefiani, el alcalde de la localidad marroquí de Chefchauen, líder en economía verde de la región MENA, es una de las voces más elocuentes de las ciudades de tamaño medio con aportaciones a la sostenibilidad medioambiental, desafío que estas poblaciones encaran con características específicas. Figura activa en redes y foros como CGLU, ICLEI y LGMA, y todo un referente en el concepto de ecoturismo, Sefiani participó en noviembre de 2024 en la 3ª Reunión Ministerial sobre Urbanización y Cambio Climático, uno de los encuentros celebrados en el marco de la COP 29 de Bakú, cuyos acuerdos en materia de financiación el alcalde norteafricano considera bienvenidos aunque insuficientes.
Mohammed Sefiani es ingeniero electromecánico por la Escuela Nacional de Minas de Rabat, donde se graduó en 1990, y posee un certificado de Formación en Gobernanza Local expedido por la Universidad de Miami. En 2009 resultó elegido alcalde de Chefchauen (también denominada Chauen), una población de 40.000 habitantes y capital de la provincia homónima de la región de Tánger-Tetuán-Alhucemas, en las estribaciones montañosas del Rif, conocida por su patrimonio histórico y su bella arquitectura popular, con sus casas encaladas en azul. De ahí que Chefchauen reciba el sobrenombre de la perla azul de Marruecos.
Cuando llegó al Ayuntamiento, Sefiani se planteó el objetivo de preservar la conservación de una de las localidades más pintorescas y fotografiadas del norte de Marruecos, compaginando de manera equilibrada la afluencia creciente de turistas, fuente de ingresos para la economía local, y los criterios de sostenibilidad, básicos para los vecinos. Se trataba de mantener intacto el entorno natural de Chefchauen, emplazada en un fértil valle agrícola, fundamento a su vez de un rico patrimonio inmaterial culinario. Velar por el "buen vivir" de los habitantes de Chefchauen, en suma.
En 2010 el concejo proclamó a Chefchauen "ciudad ecológica", a lo que siguió una serie de medidas de protección ambiental, eficiencia y ahorro energéticos, desarrollo de energías renovables y reducción de emisiones carbónicas. En 2018 Sefiani presentó la Visión Chefchauen 2030, que abordaba las metas de la adaptación y la mitigación climáticas desde una perspectiva integral, tocando no solo las cuestiones medioambientales, sino también las sociales, económicas y culturales, y haciendo hincapié en la elaboración de estrategias participativas de los vecinos.
En noviembre del mismo año, la iniciativa innovadora de Sefiani mereció un premio de la Africities Summit, evento trienal de la sección africana de la Organización Mundial de Ciudades y Gobiernos Locales Unidos (CGLU), reunida en su octava edición en Marrakech. Previamente, el alcalde marroquí fue elegido presidente del Foro de Ciudades Intermedias de CGLU, cuya primera reunión mundial Chefchauen co-hospedó en julio.
En este encuentro de 2018, responsables municipales de 40 países analizaron la importancia de las ciudades de mediano tamaño como nexos entre las poblaciones rurales más pequeñas y los grandes centros urbanos, con su potencial para reducir las desigualdades territoriales, así como en la implementación de la Nueva Agenda Urbana y los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas. De sus deliberaciones salió la Declaración de Chefchauen-Carta de las Ciudades Intermedias del Mundo. Cuatro años después, en 2022, CGLU designó a Sefiani su enviado especial para Sistemas Alimentarios, en adición a una de las vicepresidencias de su Grupo de Trabajo sobre el Clima en África.
Considerado una autoridad en cuestiones de sostenibilidad de los municipios desde una perspectiva ecoturística, Sefiani pasó a desarrollar su activismo en otras redes y foros globales: el Foro Urbano Mundial (WUF), organizado por el Programa de la ONU para los Asentamientos Humanos (ONU-Hábitat) y con reuniones bienales; el Pacto Mundial de Alcaldes por el Clima y la Energía (GCoM), en calidad de embajador para África; ICLEI-Gobiernos Locales por la Sostenibilidad, como miembro de su Comité Ejecutivo Regional de África y vicepresidente global (posición esta última para la que fue elegido en junio de 2024, con un mandato de tres años y secundando a la presidenta Katrin Stjernfeldt Jammeh, alcaldesa de la ciudad sueca de Malmö); y la Circunscripción de Gobiernos Locales y Autoridades Municipales (LGMA), la plataforma portavoz de las administraciones locales y subestatales en los trabajos de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC/UNFCCC).
En el ámbito nacional y regional, Sefiani asumió asimismo las presidencias de la Asociación Marroquí de Eco-Ciudades (AMEV), la Federación de Colectividades Locales del Norte de Marruecos y Andalucía (AN^MAR) y la Red de Medinas del Mediterráneo, entre otros compromisos.
El alcalde Sefiani representó a las entidades locales adheridas al ICLEI y la LGMA en la 3ª Reunión Ministerial sobre Urbanización y Cambio Climático. Este fue uno de los encuentros multilaterales que tuvieron lugar en el marco de la 29ª Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, desglosada en la 29ª Conferencia de las Partes de la CMNUCC (COP 29), la 19ª Reunión de las Partes del Protocolo de Kyoto (CMP 19) y la 6ª Reunión de las Partes del Acuerdo de París (CMA 6), celebrada del 11 al 22 de noviembre de 2024 en la capital de Azerbaiyán, Bakú. La Conferencia concluyó con un acuerdo en torno a planes para la financiación de la mitigación de los efectos del cambio climático y la asistencia económica a las naciones en desarrollo para ayudarlas en su transición hacia unas fuentes energéticas más sostenibles.
Tras presentar a Chefchauen como una ciudad "líder en la acción multinivel y la financiación climática innovadora", el edil marroquí formuló a la COP 29 tres peticiones concretas relacionadas con la capacidad financiera de la Circunscripción LGMA y en aras de un "apoyo justo y equitativo al desarrollo climático resiliente": que se armonizaran los procedimientos, simplificando las modalidades de acceso y aumentando los recursos destinados a la ejecución de los proyectos por los gobiernos locales y subnacionales; que se asegurara a estos un acceso directo, sin agentes intermediarios, a los fondos habilitados por los países desarrollados para reducir emisiones; y que se aumentara sustancialmente la dotación de dichos fondos, del orden de "billones de dólares anuales" hasta 2035, lo que requería "reformar la arquitectura financiera global y los bancos multilaterales de desarrollo". Un punto muy importante para Sefiani era que los instrumentos de la financiación climática quedaran al margen de las contabilidades de deuda de todos los gobiernos y administraciones implicados, tanto los locales y subnacionales como los estatales.
Una vez concluida la Conferencia de Bakú y conocidos los términos del acuerdo, Sefiani volvió a tomar la voz para, en nombre de ICLEI, valorar en términos matizadamente críticos los resultados del magno evento, que le parecían positivos aunque de todo punto insuficientes. Así, el alcalde manifestó su "preocupación" por que la ambición del Nuevo Objetivo Colectivo Cuantificado (NCQG) de financiación de reducción de emisiones de la CMNUCC se limitara a los 300.000 millones de dólares anuales hasta 2035, en vez del objetivo mínimo, trazado por el ICLEI, de los 1,3 billones.
Esos 0,3 billones al año para los países en desarrollo suponían triplicar el montante de inversiones ahora existente, además de tratarse del primer acuerdo sobre financiación climática en 15 años, pero se quedaban "muy por debajo de las verdaderas necesidades para apoyar a todas las comunidades del planeta a combatir el cambio climático y adaptarse a sus riesgos", opinaba Sefiani. Chefchauen era una de las ciudades que abrazaba la llamada Iniciativa CHAMP, adoptada por el ICLEI en la COP 28 de 2023 en Dubái: la Coalición para una Asociación Multinivel de Alta Ambición.
En 2025 iban a tener lugar nuevas citas clave de índole climática y la siguiente gran oportunidad para avanzar en las altas expectativas concebidas por ICLEI/LGMA era la COP 30, a celebrar en noviembre en la ciudad brasileña de Belém. Para ICLEI-África, la CMNUCC aún tenía mucho trabajo que hacer, un trabajo cada vez más urgente, en los capítulos de la financiación, la mitigación y adaptación, el desarrollo de capacidades, las transiciones energéticas justas y la operatividad del Fondo de Pérdidas y Daños, aprobado por la COP 27 de 2022 en Sharm El Sheij, Egipto.
(Cobertura informativa hasta 4/12/2024).
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